12/09/2022
En el Día del Maestro Boca hizo mejor los deberes. Ganó sin alcanzar un rendimiento sobresaliente, pero tuvo o mucha actitud y entrega y embocó un cabezazo que le permitió aprobar el examen. River, confundido, estuvo muy lejos de su mejor versión y reprobó.
Matemática. Boca llego tres o cuatro veces y acertó una. Tuvo el 55 por ciento la pelota en el primer tiempo y la regaló después del gol de Benedetto. River tuvo una sola situación clara de gol: un cabezazo de Mammana al comienzo del partido. En el balance general, estuvo muy lejos de sus números habituales de triangulación, pared, toque y llegada franca.
Geografia. River de sur a norte jugó con línea de cinco en el fondo, tres en el medio y dos arriba. En el fondo Díaz, Mamanna, Pinola y abiertos Herrera a la derecha y Casco a la izquierda. Casco subió más, Herrera tiró pelotazos varios desde la posición de 4 adelantado. Juanfer Quintero tenía la misión de conectar el mediocampo con Suárez y Solari, pero encontró un terreno lleno de accidentes y Rossi le quedó a kilómetros de distancia. Del otro lado, todo sencillito. Un esquemas 4-4-2, con Varela como dique de contención, Payero al este y Pol Fernández al oeste, y Ramírez intentando sorprender por el meridiano. Armani también le quedaba lejos como referencia, hasta que llegó el gol en el segundo tiempo.