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A pesar de que Novak Djokovic apareció este miércoles entre los participantes inscriptos para el próximo US Open, todo parece indicar que el serbio se perderá el último grande del año.

Es que la USTA (United States Tennis Association) confirmó este miércoles que respetará la política del gobierno de los Estados Unidos, que no le permite el ingreso al país a extranjeros no vacunados.

"El US Open no tiene un mandato de vacunación para los jugadores, pero respetará la posición del gobierno de los EE. UU. con respecto a los viajes al país para los ciudadanos no estadounidenses no vacunados", reza el comunicado de la asociación estadounidense.

Djokovic, quien no ha ocultado su posición en contra de las vacunas, ya se ha perdido un Grand Slam esta temporada por este mismo motivo, al ser deportado de Australia en enero por problemas con su visa, tras llegar al país habiendo presentado una "exención médica".

Eso sí, pese a su estado de vacunación, el serbio pudo jugar los otros dos grandes, Roland Garros y Wimbledon, ganando este último por séptima vez en su carrera, lo que le permitió quedar a