04/05/2020
Los madrileños llevan confinados en sus casas desde el pasado 14 de marzo y, en tan solo tres semanas de confinamiento, la contaminación se ha reducido a niveles históricos. La mítica boina gris que siempre se veía sobre la ciudad (y se apreciaba desde lejos) ha desaparecido hasta el punto de que, desde el centro, pueden verse perfectamente las montañas de la sierra.